Parque Shelbourne

Shelbourne Park, ubicado en Ringsend, Dublín, es uno de los estadios de carreras de galgos más icónicos de Irlanda, con una rica y variada historia que se remonta a su apertura en 1927. Construido en South Lotts Road, el parque ha experimentado una notable evolución, pasando de ser un simple lugar de entretenimiento a un centro multifuncional de eventos deportivos y sociales. Inicialmente, Shelbourne Park fue creado como respuesta dublinesa a Celtic Park de Belfast, convirtiéndose rápidamente en un punto focal para las carreras de galgos en Irlanda. Su inauguración atrajo a aproximadamente diez mil espectadores, marcando el inicio de una tradición que continúa hasta el día de hoy. Jerry Collins, Paddy O’Donoghue, Patsy McAlinden y Jim Clarke fueron las mentes detrás de la National Greyhound Racing Company Limited, la precursora de la actual Irish Greyhound Board. Las carreras de galgos en Shelbourne Park no estuvieron exentas de incidentes. En septiembre de 1927, un evento dramático vio a dos perros, Galbally Lass y Skeango, detenerse a mitad de la carrera y atacarse mutuamente, desencadenando un motín entre el público de la sección económica que terminó con la intervención de la policía. Estos episodios, a pesar de su dramatismo, contribuyeron a reforzar la legendaria aura del parque. Shelbourne Park no se limitó solo a las carreras de galgos. Con el paso de los años, el estadio ha albergado una variedad de eventos deportivos, incluyendo carreras de trote, competiciones de hockey internacional e incluso partidos de rugby league. En 1934, el rugby league llegó al parque con un partido inaugural entre Warrington y Wigan, patrocinado por el Irish Hospital’s Sweeps Trust, que atrajo a miles de espectadores. En 1950, el parque también introdujo el speedway, con motocicletas corriendo por la pista, atrayendo a entusiastas espectadores y pilotos estadounidenses. Este deporte permaneció en el parque durante varios períodos entre las décadas de 1950 y 1970, con equipos como los “Shelbourne Tigers” enfrentándose a oponentes de todo el Reino Unido, atrayendo a miles de personas a South Lotts Road. Shelbourne Park experimentó una significativa modernización en 2001, convirtiéndolo no solo en un lugar de carreras, sino también en un espacio versátil para eventos y conferencias. Su ubicación céntrica en Dublín, cerca del Grand Canal Dock y del Aviva Stadium, lo convierte en un lugar ideal para reuniones empresariales y sociales, gracias a sus modernas instalaciones y personal experto. El parque se ha hecho famoso por su capacidad para albergar eventos de gran envergadura, como el “Jumping in the City”, un evento ecuestre organizado por la Irish Greyhound Board que utiliza los espacios del parque para actividades de salto de obstáculos. Esta diversificación de eventos ha permitido a Shelbourne Park mantenerse relevante y seguir siendo un pilar de la comunidad dublinesa. A lo largo de los años, el parque ha sido testigo de numerosos momentos memorables. En la década de 1930, la Irish Free State Football Association utilizó Shelbourne Park para las semifinales y finales de la FAI Cup. Una de las finales más épicas tuvo lugar en 1929 entre Shamrock Rovers y Bohemians, atrayendo a una enorme multitud y creando una atmósfera eléctrica. Shelbourne Park también tiene un vínculo especial con la historia del fútbol irlandés. En la década de 1920, el parque fue el hogar del Shelbourne FC, uno de los clubes de fútbol más antiguos de Irlanda. El club utilizó el estadio hasta 1949, cuando se trasladó a otra sede. Durante este período, el parque fue testigo de muchos partidos históricos, incluido un memorable enfrentamiento contra el Manchester United en 1921, que marcó la primera visita del club inglés a Dublín. Hoy en día, Shelbourne Park sigue siendo un centro de entretenimiento animado, con carreras de galgos que se celebran cada viernes y sábado por la noche. Los espectadores pueden disfrutar de una amplia gama de servicios, incluidos restaurantes de alta calidad y paquetes para grupos que ofrecen una experiencia inolvidable. La atmósfera única y la emoción de las carreras hacen que cada visita a Shelbourne Park sea una experiencia especial. El parque también es conocido por su dedicación a la sostenibilidad y al bienestar de los animales, con instalaciones de vanguardia que garantizan el tratamiento ético de los galgos. Esta atención al detalle y a la calidad ha contribuido a mantener a Shelbourne Park en la cima de los lugares de carreras en Irlanda.