Palacio de San Telmo

Europa,
España,
Sevilla,
Santa Cruz
El Palacio de San Telmo, ubicado en Sevilla, es uno de los edificios barrocos más representativos de la ciudad y de toda Andalucía. Construido a partir de 1682, inicialmente el palacio funcionaba como sede del Colegio-Seminario de la Universidad de Mareantes, una institución dedicada a la formación de jóvenes huérfanos de marineros y futuros navegantes. Esta función se mantuvo hasta 1847, cuando el edificio comenzó a destinarse a varios usos, incluyendo la sede de la Sociedad del Ferrocarril y la Universidad Literaria. En 1849, el Palacio de San Telmo fue adquirido por Antonio de Orleans y Luisa Fernanda de Borbón, Duques de Montpensier, quienes lo convirtieron en su residencia oficial. Los Duques llevaron a cabo una importante obra de restauración y ampliación del palacio, completando la torre norte y construyendo el ala oriental y la sala de baile. Estos nuevos espacios fueron decorados con estucos dorados y frescos, incluyendo los del famoso pintor Rafael Tejeo. En este período, el palacio se convirtió en un centro de vida social y cultural, albergando importantes eventos y personalidades de la época. La fachada principal del palacio, completada en 1754, es una obra maestra del barroco español, caracterizada por la entrada de estilo churrigueresco, diseñada por Leonardo de Figueroa y completada por sus descendientes. Esta entrada, con sus columnas esculpidas y estatuas alegóricas que representan las artes y las ciencias náuticas, está coronada por una estatua de San Telmo, patrón de los marineros, acompañada por las figuras de San Fernando y San Hermenegildo, patrones de Sevilla. En 1897, tras la muerte de la Infanta María Luisa Fernanda, viuda del Duque de Montpensier, el palacio fue donado a la Archidiócesis de Sevilla. Los espléndidos jardines del palacio fueron cedidos a la ciudad y transformados en el Parque de María Luisa, uno de los parques públicos más queridos de Sevilla. En 1901, bajo el arzobispo Marcelo Spínola, el palacio se convirtió en un seminario diocesano, función que mantuvo hasta 1989. Desde 1991, el Palacio de San Telmo ha sido sometido a una serie de restauraciones para devolverlo a su antiguo esplendor y adaptarlo como nueva sede del gobierno regional andaluz. Las intervenciones han permitido redescubrir y valorar los elementos arquitectónicos y decorativos originales, a menudo ocultos o alterados por restauraciones anteriores. El arquitecto Guillermo Vázquez Consuegra ha liderado estos trabajos, centrándose en la restauración de los interiores y en la adecuación funcional del edificio. Hoy en día, el Palacio de San Telmo alberga la presidencia de la Junta de Andalucía y representa un importante símbolo de la historia y la cultura andaluza. Su ubicación estratégica a lo largo del río Guadalquivir, cerca del prestigioso Hotel Alfonso XIII y del Parque de María Luisa, lo convierte en una parada obligatoria para quienes visitan Sevilla. La fachada del palacio, con sus esculturas de doce ilustres sevillanos realizadas por Antonio Susillo en 1895, es una celebración de la rica herencia cultural de la ciudad. La capilla del palacio, dedicada a la Virgen del Buen Aire, es otra joya artística, con una nave única, una bóveda de cañón y cinco altares decorados. Estos incluyen representaciones de Santo Tomás de Aquino, San Antonio, un Cristo crucificado y San José, reflejando la importancia espiritual y artística del complejo. El Palacio de San Telmo ha sido escenario de eventos significativos, como la propuesta de matrimonio del rey Alfonso XII a la hija de los Duques de Montpensier, María de las Mercedes, en 1877. Este evento, celebrado en la majestuosa sala principal del palacio, subraya el papel central que el edificio ha tenido en la historia real y política de España.
Leer más