El Krijtberg

De Krijtberg, formalmente conocida como Sint Franciscus Xaveriuskerk, es una iglesia católica situada en el centro histórico de Ámsterdam, en el canal Singel. Construida en estilo neogótico entre 1881 y 1883, esta iglesia representa una de las sedes más antiguas y significativas de los Jesuitas en los Países Bajos. El proyecto fue encargado al arquitecto Alfred Tepe, conocido por su trabajo en el ámbito de la arquitectura eclesiástica. La historia de De Krijtberg se remonta a 1628, cuando el jesuita flamenco Pieter Laurenz fundó una capilla privada en una casa en el Singel, dedicada a San Francisco Javier. Durante este período, los católicos en los Países Bajos debían practicar su religión en secreto debido a las restricciones impuestas por la Reforma Protestante. La capilla original era una “schuilkerk”, o iglesia oculta, que operaba discretamente detrás de la fachada de un palacio mercantil. A pesar de la vigilancia de las autoridades, la comunidad católica continuó creciendo, requiriendo en 1677 la construcción de una capilla más grande. Esta también permaneció oculta hasta 1796, cuando a los católicos se les concedió el derecho de practicar libremente su religión. En 1835, la capilla fue ampliada aún más, pero pronto se hizo evidente la necesidad de un edificio aún más grande para albergar a la creciente congregación. La construcción de la iglesia actual comenzó en 1879 y se completó en 1883. El nuevo edificio, en estilo neogótico, reemplazó varias casas históricas a lo largo del Singel. La iglesia fue consagrada el 3 de diciembre de 1883 por el obispo de Haarlem. La fachada se caracteriza por dos torres gemelas y un alto frontón decorado con detalles góticos, mientras que el interior, de tres naves, está rico en ornamentos y obras de arte. El interior de De Krijtberg fue decorado con numerosos programas iconográficos que expresan la restauración del catolicismo en los Países Bajos después de 1853. Las paredes están adornadas con frescos y esculturas en arenisca que representan jesuitas canonizados, entre ellos San Francisco Javier, San Ignacio de Loyola y San Pedro Claver. Las vidrieras representan santos de la Compañía de Jesús, añadiendo un nivel adicional de belleza y significado espiritual al ambiente. El altar, el baldaquino y numerosos otros elementos del mobiliario interior son obras del taller de Friedrich Wilhelm Mengelberg, completadas entre 1882 y 1886. La reja del coro, que separa la zona del altar del espacio comunitario, es particularmente digna de mención: construida en madera, muestra representaciones de los doce apóstoles y está coronada por un Calvario modelado según la iconografía medieval. Un elemento distintivo de De Krijtberg es la capilla de Santa María en la nave izquierda, cuyo altar, creado también por el estudio Mengelberg en 1885, representa escenas de la vida de María. Estos detalles artísticos no solo enriquecen la experiencia visual de los visitantes, sino que también subrayan la profundidad de la tradición católica que la iglesia representa. A pesar de la amenaza de cierre en los años 60 debido a la disminución de fieles, De Krijtberg fue declarada Monumento Nacional en 1974, un reconocimiento que garantizó su conservación. Los trabajos de restauración se completaron en 2003, preservando la integridad histórica y artística de la iglesia.