Museo Nacional del Automóvil

El Museo Nacional del Automóvil de Turín, actualmente dedicado a Gianni Agnelli, es una de las instituciones museísticas más importantes en el sector automovilístico a nivel mundial. Fundado en 1932 por Cesare Goria Gatti y Roberto Biscaretti di Ruffia, nació con la idea de celebrar a los “Veteranos del Automóvil” y ha visto su desarrollo gracias al compromiso de Carlo Biscaretti di Ruffia. Inicialmente sin una sede fija, el museo encontró su ubicación definitiva en 1960, en un edificio diseñado por Amedeo Albertini, situado a lo largo del río Po. El crecimiento del museo ha estado marcado por momentos cruciales como la aprobación del proyecto en 1933 y la apertura al público en 1939, a pesar de las dificultades relacionadas con las sedes temporales y los daños sufridos durante la Segunda Guerra Mundial. El renacimiento del museo en la posguerra, con el apoyo de la industria automovilística italiana y la familia Agnelli, llevó a la construcción de la sede actual. El edificio, caracterizado por una fachada convexa revestida de piedra, es un ejemplo significativo de arquitectura moderna. La estructura se desarrolla en tres volúmenes conectados por módulos laterales suspendidos, creando un jardín de invierno en el patio interior. La renovación de 2011, diseñada por el arquitecto Cino Zucchi, amplió y modernizó aún más los espacios, convirtiendo al museo en un polo cultural de vanguardia. El museo alberga una colección permanente de más de 200 vehículos, representativos de la historia automovilística desde 1769 hasta 1996, producidos por 80 fabricantes de automóviles de diez países. Entre las piezas más valiosas se encuentran coches de competición como el Ferrari F310 de Michael Schumacher y el Alfa Romeo 179B. La exposición se organiza en tres plantas, cada una con una temática específica: la historia del automóvil, la relación entre el hombre y el automóvil, y el diseño automovilístico. El Museo Nacional del Automóvil no es solo un lugar de exposición, sino también un centro de documentación e investigación con una biblioteca rica en textos, documentos y fotografías. La biblioteca, dividida en siete secciones, ofrece una visión completa de la historia de la locomoción y las marcas automovilísticas. El centro de documentación, diseñado por el Studio LL.TT, recopila más de 7000 textos y una amplia hemeroteca. La Escuela de restauración, ubicada en el sótano del nuevo edificio, es un laboratorio donde se restauran los vehículos de la colección, garantizando la conservación y valorización del patrimonio museístico. El “Garage” alberga los vehículos no expuestos en la exposición permanente, que se rotan. Uno de los aspectos más fascinantes del museo es su compromiso de ofrecer una experiencia interactiva a los visitantes. Las instalaciones escenográficas y multimedia contextualizan los vehículos expuestos, creando un recorrido inmersivo que narra la evolución del automóvil y su impacto en la sociedad. Las celebraciones por el 150 aniversario de la Unidad de Italia en 2011, que contaron con la presencia del presidente Giorgio Napolitano, destacaron el papel del museo como guardián del patrimonio cultural e industrial del país. La frase de Napolitano, “Arte e industria sono la nostra forza”, resume perfectamente la misión del museo: combinar la belleza artística y la genialidad técnica en un lugar que inspira y educa.